Fotos en el parque

Casi un año

Pues sí, tan sólo quedan 4 días para que hagan ya un añazo! O un añito según se mire. El sábado 30 de Setiembre cumplen ya su primer año de vida. Y estos días los padres estamos constantemente recordando los días previos a su nacimiento y lo que ha cambiado nuestra vida. Y la vida nos ha cambiado un montón; y a mejor o por lo menos el cambio lo estamos disfrutando muchísimo. Es curioso (y normal) como toda nuestra vida gira ahora alrededor de dos personillas y como nuestras necesidades quedan relegadas a un segundo plano con tal de poder satisfacer las suyas. Y es una pasada todo lo que te aportan en todos los planos y como vuelves a descubrir las cosas, mirando a través de sus ojillos. Es un año de progreso constante y sin parar un momento. Cada día te sorprenden con algo nuevo que han aprendido o con una nueva imitación de lo que hagas.

Bueno ahora os cuento un poco el último mes (ya hacía casi un mes que no escribía) que hemos tenido algunos progresos:
- Lo primero es que Hugo ya tiene dientes! Sí le han salido ya dos en la parte de abajo. El primero se lo vimos el 14 de Setiembre. Ya no será el mismo a partir de ahora, su sonrisa de desdentado ya tiene dos dientecillos. También se mantiene de pie él solito. Aguanta ya bastante tiempo y en cuanto ve que se puede caer, se agacha y se sienta. Ya ha dado algún que otro paso sin ayuda de nadie, pero de manera circunstancial. Ya se mueve con mucha rapidez apoyándose en la pared, en las sillas o en el sofá.
- Pablo ya también se mueve de pie muy deprisa y se pone sin problemas de pie cogido a lo que pille. Ya se agacha cogido de una mano para coger las cosas del suelo sin llegar a sentarse. Además es muy gracioso, porque hay veces que está jugando con algo y sentado se dedica a dar vueltas sobre si mismo. Ha espabilado un montón. Además tiene su manera peculiar de gatear: si va despacio, gatea "normal", pero cuando quiere ir deprisa, con el pie izquierdo se impulsa.
- Y los dos están como motos, no paran quietos ni un minuto. Muchas tardes les tenemos sentados (bueno esto es un decir) en el suelo rodeados de juguetes y los tíos van de un lado para otro sin parar. Eso sí, de vez en cuando saltan chispas entre los dos, como la vez que se cogieron los dos de la cabeza y frente contra frente intentaban morderse. Y Pablo es un "culoveoculoquiero", juguete que tiene Hugo, juguete que intenta conseguir por todos los medios, con el consiguiente berrinche de los dos. Uno porque se lo quieren quitar y el otro porque no le dejamos cogerlo normalmente.
- Las comidas son cada vez más "divertidas". Los dos comen fenomenal, pero es que han aprendido a hacer pedorretas con la boca llena y cuando las hacen, nos suelen poner perdidos de papilla toda la cara, además de la cocina claro. Los padres nos ponemos serios, pero se miran entre ellos y empiezan a reirse y claro nuestra máscara de seriedad se difumina de verles reir a los dos. Suele empezar uno de los dos con las pedorretas y el otro le sigue al cabo de los pocos segundos.
- A veces da la sensación de que hablan entre ellos con sus ruiditos. A lo mejor Hugo está haciendo algo y llama a Pablo para que se una o le mire. Sabemos que le llama, porque PAblo puede estar haciendo otra cosa, sin fijarse en Hugo y cuando Hugo le mira y le hace un sonido concreto, Pablo se pone a mirar a ver que hace su hermano.

El otro día estuvimos en el parque con ellos. Se lo pasaron genial. En los columpios unas risas entre ellos; y el tobogán les encanta. Eso de bajar a toda velocidad les hace destornillarse de risa y alegría. Como han cambiado nuestros domingos. Ahora nos levantamos a las 8 y pico, nos bajamos al parque para que jueguen un buen rato. VAmos que nada que ver con lo que hacíamos antes.

Bueno y el sábado tenemos fiesta de cumple, con globos, tarta, chuches, patatas y demás, como cuando eramos enanos! Qué ilusión! Ya os contaré aquí y os pondré fotitos!